Amanecemos con el susto del día anterior. ¡Ah! ¿Que no lo hemos contado? Pues es el momento de
pánico más tonto de la historia. Hay que ver lo que un clásico del cine te puede hacer
disfrutar, pero lo que viene siendo sufrir, también:
Os lo vamos a intentar transmitir en un audio: Ojo, dramatización (la
histeria no va muy lejos de la realidad).
Este día promete. La gofrera sin cola, luce un sol
espectacular, la chica del buffet nos sonríe porque le dejamos la mesa
relimpia, todo bien. Así que Check out y rumbo a Perdido Beach, una de las
playas más espectaculares de la zona.
Para despedirnos, nuestros amigos de la
base naval aérea decidieron sacar los cazas para hacer maniobras al más puro
estilo Top Gun.
Maitane- ¡Mira, mira, mira! un caza como sube
Cheli- ¡Buah! que velocidad
Vero-¡Ostias! que rápido baja… ¿¿y ese humo que le sale??
Cheli- ¡¡Tiene forma de medio corazón!!
Maitane- ¡Ayy! igual se está declarando a otro piloto
Vemos desaparecer el caza tras los arboles
Maitane-… ¿por qué no sube?
Vero- ¿No va a terminar el corazón?
Maitane- Ay jode que se ha estampado…
Cheli- Saca el Compeed que es lo que tenemos a mano para los
primeros auxilios
Vero- Que mal rollo…¡¡nooo!! ¡¡Ahí,
ahí, ahí está!! Guarda el Compeed que está muy caro
Seguimos nuestro camino a las millas correspondientes hasta
el parking público de la playa. ¡Que
maravilla! Aparcamiento y todo libre. ¿Y la playa? Kilométrica, desierta, de
arena blanca y agua negra. Soñábamos con tender nuestros cuerpos al sol y
relajarnos por fin. Fue poner un pie en la playa y levantarse un “hurricane”.
Que arena maravillosa, que daño hace al golpear la muy hija puta. Pero si Irma
no nos ha frenado, no íbamos a dejar que lo hiciera su primo lejano. Usamos
diferentes técnicas para posicionar nuestras toallas en la arena. Mayormente consistían
en anclarlas con nuestros cuerpos no sin antes hacer con ellas “la cometa”. De
verdad que lo intentamos pero cuando la arena empezó a acumularse en los lugares
más insospechados, y a exfoliar partes que nunca debieran ser exfoliadas
asumimos nuestro fracaso y recogimos. Aquí las fotos de postureo máximo.
No nos queda otra que atravesar Alabama rumbo Loussiana.
Sentido del ridículo… ¡¡ceroooooo!!
Desde que sabemos subir videos aquí estamos perdiendo el
North (que se vea que sabemos inglés, al menos palabras sueltas).
¿Y el fichaje que hemos hecho? ¡Esta torda invitada que
atraviesa estados con una facilidad pasmosa! ¡Que no se inmuta al volante! ¡Que
calma, que arte, con que flow entró en Nueva Orleans! Que aquí es muy fácil
darse el pegote con tu cochazo de lunas tintadas y rap a toda pastilla, pero a
ver quién entra dándolo todo con Rosendo y su “picaporte” no es que yo lo sepa
ni me importe…”
Hotelazo. Nos meten el coche en el parking y todo. Nuestra
habitación en el tercero, que quieras que no, te da una tranquilidad ante
posible repetición de inundación que no la tiene el primero.
Ducha y calle. Primeros problemas en NOLA (Nueva Orleans
LouissianA) con el idioma. Concretamente con el español. Una amable
hispanoparlante a la que preguntamos
necesita repasar la derecha y la
izquierda con Barrio Sésamo. ¡En mala hora le preguntamos! Muy buena
temperatura para el paseo, ahora lo que hicimos en una hora podríamos haberlo
hecho en 10 min. La gente bebe todo el
rato en NOLA. Da igual la hora. Y como la señora nos vio pinta de gente bien
nos mandó al casino. Como gente de bien entramos y como gente pobre que somos,
salimos y nos tomamos un heladito en el terraceo de en frente. De aquí al hotel.
Ya lo sabemos, podíamos haber titulado esta entrada “desenfreno en NOLA”.





Vivís al límite, babies!!!
ResponderEliminarMe ha encantado vuestra entrada con Rosendo a tope!
Muy buena la sacarina delante del megagofre....
ResponderEliminarCon ganas me quedé de ver el vídeo de Alabama!
ResponderEliminarPero.....con ese book como no os han cogido en la bar!