Hay que decir que nos recogimos
con estilo. En cuanto vimos la chimenea salimos de allí corriendo a recoger una
botellita de vino Chileno y un picoteo
“sano”. Las Tordas nos jugamos la vida cruzando una carretera para conseguirlo.
Tardamos más en cruzar que en hacer la compra, eso sí, nos pitaron por buenorras.
O por incoscientes, no lo tenemos claro. La cuestión es que brindamos,
disfrutamos y Vero consiguió hacer fuego con una espumadera y un cuaderno. Casi
morimos por intoxicación de humo, pero el fuego ahí estaba.
Además hicimos un amigo, porque María, que es más
sociable que nosotras, enseguida abre las puertas del palafito a cualquier
guapetón cariñoso con cuerpazo que se presente, y así Pepe apareció en nuestras
vidas.
Llegó el 18 y nosotras estábamos
a tope con la celebración hasta que nos explicaron que casualmente, en esa zona
se celebra pero no demasiado, Parece que ese lugar fue el último bastión Español en Chile y los Chilotes pelearon
junto a los españoles, así que lo celebran justito. ¡Alegría! ¡A tope con la
celebración! ¡Qué suerte la nuestra!. Algo nos teníamos que haber “olido”
cuando Pepe se pedorreo a gusto al venir a darnos los buenos días (espectáculo audio-olfativo). No nos rendimos y nos
vamos a dar una vuelta por el pueblo. El frío y la lluvia no nos acobardan, menos
aún cuando empezamos a oír el el discurso y a ver marineros, militares,
bomberos… ¡Parece que si celebran! Allá que nos acercamos a cotillear.
Casualmente nos acercamos por el lado equivocado de la tribuna así que. Hemos
debido salir en la TV Chilena de fondo con txanos y bufandas al más puro estilo
de la guerrilla colombiana, sin violencia, sin reivindicación en ese momento, pero a tope con la Tv y la Chilenidad. Las Tordas despuntando a nivel
internacional.
Siguiendo con las fiestas, las
txoznas aquí se llamas Fondas. Y nuestra mejor parte del plan del día era
inmiscuirnos en una como 3 Chilenas más. Que somos muy de lo típico. Todos los
carteles nos indicaban que fuéramos a la fonda “Onde Victor” (tal cual) y no
pudimos resistirnos.
Pagamos nuestros 5000 pesos para aparcar, empezó el
diluvio universal y viendo cómo se
hacían charcos en el escenario y las mesas para comer, esquivamos el barrizal y
nos largamos al grito de” ¡Será por Fondas!” ¡Que viva Chile”. Craso error.
Todos los restaurantes del camino habían pillado fiesta y los que estaban
abiertos cerraban en ese momento para el disfrute de la fiesta por la tarde.
Menuda manera la nuestra de celebrar el día patrio, con un hambre de muerte.
Eso sí, conocimos pueblos, Ancud, Castro, Dalcahue… hasta que localizamos un garito con techo que
nos acogió y llenó nuestros estómagos con dieta detox, detox-ino. Si amig@s,
lo que leéis, pan con trocitos de tocino. No sabéis la alegría al descubrir que
las chispitas de pan no eran pasas ¡eran trozos de tocino! ¡Que viva la dieta
detox-ino!
No os hemos contado aún que María se ha casado y está pasando su luna de miel con las Tordas; que animada. Pues
nosotras, que pensamos en todo, pillamos las noches en Puerto Varas en un hotel
con Tinaja (Jacuzzi) y la habitación con vistas al volcán Osorno. María no
quería saber nada del remojón al descubierto y el volcán no se veía por la
bruma. Todo continúa genial en la fiesta nacional. ¡Que viva Chile y su clima!.
Como planazo alternativo hicimos la siesta en triple cucharita. Ya más por
vicio que por necesidad.
Y amaneció. Y mira que es grande
el volcán. Pues más grandes eran las nubes. El desayuno nos levantó el ánimo y
nos fuimos rodeando el lago Llanquihue hasta el parque nacional….. para navegar
por el lago de “todos los santos”.
Casualmente nos tocó barco grande para las tres solas. Tuvimos chalecos
salvavidas de sobra y explicaciones con cotilleo. El lugar es espectacular; el
agua del lago se puede beber, los terrenos se heredan y, ahora que están
protegidos no se puede especular, aunque los nativos han malvendido algunas
tierras. El que ha estado listo ha sido
el dueño de Columbia que tiene cabañita a pie de lago. Señor de Columbia, ahora
que hemos descubierto el sportwear nos gustaría echar el curriculum para ama de
llaves de su casa del lago. Si es necesario compraremos sportwear de su marca,
pero ya le adelantamos que nos viene un poco “regu” de txines. De todas formas
entendemos que la uniformidad será de su marca y tendrá “tallita”. Y además
tenemos titulación para navegar, y sino, podemos remar. Cheli en cuanto se
recupere; es que el Salar de Uyuni dejó huella en ella. Pensaba que tenía
agujetas en los bracitos de arrastrar la maleta, pero por lo visto fue culpa de
Emerson y su ¡amigaaaa! ¿levante los bracitos para la foto!. Madre mía. Dos
días con apertura de brazo cortita (tipo Nemo) por el exceso postural.
No nos lo tenga en cuenta MR Columbia, haremos mancuernas. |
Si el volcán Osorno no viene a
nosotras…¡Nosotras vamos al volcán Osorno!.Con alegría, con risas y con golpe de
belleza de la naturaleza hasta que los carabineros Chilenos (a los que Vero
quiere chupar la cabeza porque cada vez que ve un puesto piensa que venden
cangrejos de río o algo así), nos dieron el alto:
CARABINERO: Buenos días
señoritas
NOSOTRAS:¡¡Buenos días!!
C: ¿Hacia dónde se dirigen?
(almas de cántaro…)
N: ¡Al volcán!!
C: ¿Tienen cadenas?
N: ¡¡No!! ¡vamos sólo hasta el
refugio!
C: eh…. NO
N: ¡¡Nos han dicho en el hotel
que podíamos subir! (como si lo que dijese nuestra recepcionista fuese ley).
C: No, el tráfico está cerrado
por nieve, sólo se puede subir con cadenas.
N: ¿Podemos dar la vuelta aquí?
C: ¡Sí, por supuesto!.
Y hasta aquí, nuestra relación
con el volcán, que ni se ha sentido, ni se ha dejado ver. Empezamos a creer que
es un bulo y que en realidad no existe.
Tras este drama geológico nos
dirigimos hoy, por nuestros ovarios a una…¡FONDA!.
Y encontramos una super pro, con
su techo, sus gauchos, sus cuecas, su gastronomía típica y sus baños previo
pago. Estamos de “cancelar” por mear hasta el moño de Cheli (que es la única
que lleva).
La verdad es que muy bien, muy
Chileno, muy completo. Vero se bebió un terremoto, le dimos bien a la mandíbula
tanto en dulce como en salado.
Todo muy bien hasta que casi morimos.
Muy fuerte, San Fermines Chilenos, con encierro y todo. Nos recortó un gaucho galán a caballo, pero
en contra de todo guión de telenovela, no nos hizo caso después. Prefirió el
novillo a nosotras.
#todollenodechilenosynostienequepasaranosotras.