MUGGLES, MARKETS & MARRUBIAK

Ya lo decía Leticia Sabater, “a medio día… ¡alegría!” Y por ello, apuramos hasta casi esa hora para meternos entre pecho y espalda el tipical british breakfast.

Con su salchi-longaniza, su huevo revuelto con cebollino, su bacón, sus champis, su mierda de tomate plancha, su zumo, su café, su té, su pan con mantequilla (la mermelada nos la requisaron)… Nos emocionó tanto que casi le cantamos una saeta al camarero que nos traía los desayunos cual paso de Semana Santa. ¡Buenísimo todo!

Ante el peligro de corte de digestión por sobreesfuerzo andarín decidimos pillar el bus hacia Camden Town. Mítico bus rojo y por supuesto en el piso de arriba.

Y comenzó el vagabundeo, y puestos y más puestos con cosas de hoy, ayer y siempre. Gente curiosa en cada esquina, desde fans de la Barbie hasta unas animadas con la cara pintada rollo Halloween. Le dimos a la compra, al curioseo y de repente… ¡piano! Sonia se vuelve loca y nos toca “Still loving you”. Como os podéis imaginar, los pelos como scorpions.

Todo muy idílico con un señor diciendo a alguna de nosotras que tenía “la mejor sonrisa que había visto jamás”. No sabemos concretamente a quien porque todas lucimos sonrisa espectacular. Tampoco sabemos bien qué siroco le dio a posterori pero vino a darnos unas clases de moral y educación infantil. Por lo que le entendimos, porque todo esto fue en inglés, nos comentaba que debemos ser el espejo en el que se miran los niños, que nos imitan, que aprenden de nosotras… Algo mal debimos de hacer, no tenemos claro el qué, pero nos cayó una bronca del copón. ¡Ojocuidao! Que ni estábamos fumando crack ni nada, simplemente Sonia al piano y nosotras grabando. Pensamos que el Loco de Camden, que tenía un Mcbook Pro estupendo, entró en crisis al ver nuestros androids de mierda. Aupa Android! Una vez reñidas, la chica de una tienda adyacente nos comentó que estaba entre pirado y muy loco y que no le hiciéramos caso. Desde aquí le decimos… “¡quién te entienda que te joá Loco de Camden!”

No le haremos caso al loco pero por favor, los niños que busquen otros espejos donde mirarse. En nosotras que se miren para la risa y ser buena gente, para la vida en general, que busquen otro espejo que les irá mejor. Ya sabéis que somos Campeonas en Vida de Mierda. Es más, para muestra un botón. Organizamos un viaje estupendo a esta gente y nos tienen todo el día fregando.

tol dia limpiando como una esclavaaaaaaa

Camden mola, hay muchas cosas para ver, kuskusear, segunda mano…deberíamos hacer un “Dos de mayo kalea Town” cada seis meses con el cambio de armario. La verdad es que te puedes pasar ahí una semana y no lo ves todo.

Y tras tanto vagabundear…llegó el hambre. Mucho ha tardado porque huele a comida todo el rato. ¡Hay tanto donde elegir!

Nuestra intención para el resto del día era hacer el friki sin control, pero el aforo de Universal Studio no lo ha permitido. Universal, Warner o quien sea dueño de Harry Potter… ¡ustedes se lo pierden! Somos gente positiva así que a falta de pan, buenas son tortas. Rumbo King Cross, al andén 9 ¾ concretamente. ¡Atención! Las próximas fotos pueden herir sensibilidades o crear frikienvidias. Aclaramos que la mitad del atrezzo lo llevábamos nosotras, ya sabéis, por la niña (jiijiji)

El fotógrafo la gozó con nosotras y la de la tienda también. Los usuarios de la estación fliparon cuando al grito de “¡he pillado grajeas de todos los saboreeeees!”, empezamos a catarlas a ciegas. Que maravilla cuando a alguien que no eras tú le tocaba la del sabor a vómito o cerumen.

Hemos descubierto que hacer el friki da hambre, así que paramos para comernos unas fresas y unos plátanos. Nosotras (Cheli y Vero) a medias por supuesto, que estamos a dieta.